Controladores aéreos denuncian que paral en la estructura afecta su trabajo.n mes del
Según los controladores aéreos, el paral les quita visibilidad para poder estar atentos a la aproximación y despegue de las aeronaves, aunque el director de la Aerocivil, Gustavo Lenis, asegura que las protestas no se deben a un problema de visibilidad, sino a la negociación del pliego de peticiones del sindicato presentado hace una semana, en el que los controladores piden un aumento salarial.
“Se han dado algunos conatos de rebelión dentro del sindicato, y me imagino que él –en referencia a Carlos Bermúdez, presidente del sindicato de controladores– está tratando de unirlos a punta de prensa”, señaló el funcionario.
Pero el presidente sindical insistió: “La torre tiene una barra justo en la visual (sobre el horizonte de la pista de aterrizaje), y otros aeropuertos no tienen la barra ahí. Pedimos solucionar esa situación para minimizar ese riesgo operacional”. Bermúdez subrayó que piden una infraestructura adecuada para una industria en crecimiento.
No obstante, el director de la Aerocivil señaló que las críticas a la nueva construcción vienen de un controlador (Bermúdez) que no trabaja en la torre, “sino que es controlador de área que maneja aviones de 19.000 pies en adelante”.
Al respecto, el líder sindical explicó que conoce el problema, pues trabaja desde hace 12 años en la torre de control, da capacitaciones y es supervisor del centro de control de Bogotá.
Según Lenis, los empleados conocieron la torre hace dos meses, cuando se inauguró en diciembre, pero solo ahora presentan su queja, una semana después de la radicación del pliego de condiciones.
Así, los parales de la construcción sobre los cuales se presentan las quejas son los mismos que se concibieron desde los diseños del proyecto.
La afirmación del funcionario es negada por Bermúdez, quien dice no haber visto ese paral ni en los planos ni en la maqueta. Además, asegura que nunca pudieron tener acceso a la construcción durante la obra.
En contraposición, Gustavo Lenis manifestó: “Se ejecutó exactamente lo acordado y lo que ellos vieron. Con el tamaño de un avión, la viga no representa nada. No se pierde el avión de vista”. Insistió en que torres de control de terminales aéreas como la de Múnich (Alemania) tienen más de estas divisiones de los ventanales, sin que esto signifique que no se cumplan las normas internacionales al respecto.
Parte de la operación de control (la de la pista sur) se hace aún en la torre antigua y se espera que a finales de este mes se traslade en su totalidad a la nueva. El Dorado tiene unas 60 operaciones por hora y la meta es llegar a las 90.
